"MI REFUGIO... EL REFUGIO DEL GUERRERO..."

"MI REFUGIO... EL REFUGIO DEL GUERRERO..."

Tengo un poco de Amergim, hijo de MIL... a veces Guerrero, otras Bardo, Druida, Juez ó Poeta...Supongo que los que me conocen entenderán lo que los ingleses llaman "Bard mood", humor de Bardo... tan pronto alegre como triste, tan pronto de broma como serio.

Tan cambiante como el clima de Irlanda... tan imprevisible...

De nuevo abro las puertas de mi corazón al mundo... porque las puertas de mi alma... ya están rotas...


RESURGIENDO... (OTRA VEZ...)

RESURGIENDO... (OTRA VEZ...)


Después de casi un año que dejé olvidado este bloc, regreso a la carga...

...poco a poco iré añadiendo mis "Pensamientos en Voz Alta...", mis "Paranoias...", aquellas letras que desde hace más de una década fueron llenando las páginas de un libro que nunca vio la luz...

Hoy de nuevo, la luz del recuerdo me invade, y a pesar de lo que piensen u opinen de mi aquellos que me conocen, no voy a guardar por más tiempo mis pensamientos...

Junto a mis "Pensamientos..." (a mi me gusta llamarlos "Paranoias..."), añadiré de vez en cuando relatos de otros autores (firmados, por supuesto) que me han llamado la atención en alguna ocasión.

Espero sepan leer mis "paranoias", pues a veces son pensamientos que sólo expresan sentimientos sin sentido, otras sólo son fantasías sin ningún enlace con la realidad, pero en todas ellas expreso algo entre líneas...


...es una suerte para aquellos que son como yo... (cobardes...), lo que se puede llegar a decir a través de las letras.


Hasta muy pronto...

Dewa Matta...

lunes, 28 de agosto de 2006

Demonios...

Me buscan...
Me encuentran...
Cada cierto tiempo ellos vuelven... regresan... y me reencuentro con ellos... mis demonios.
Esta vez la visita se pospuso demasiado tiempo... pero al fin llegaron... y llegaron de improviso.
Me raptaron para dejarme arrinconado entre el miedo y la impotencia, vigilado de cerca por la desesperación.
Por un instante me sentí transportado de mi mundo seguro y estable, para verme segundos después transitando por las calles de su mundo... ese mundo que se trata de evitar día tras día.
Estos demonios, cabe decirlo, no son tan extraños, ni rojos como dicen los cuentos... No, tampoco tienen ningún apéndice extraño... lo extraño en ellos es su normalidad.
Se confunden con los demás para estar cerca de nosotros y robarnos la felicidad.
Fieros, despiadados, peludos, bien vestidos... de muy variopintas formas...
Los observo... me observan y me retienen... me sujetan de aquellas partes vulnerables a través de las que saben que pueden arañar mi alma.
El cuerpo pareciera intocable...
Preferiría quizá... tal vez... quién sabe... sí, yo, lo sé...
Preferiría un infierno como el de Dante antes que esta nube extraña en donde flotan y nos tienen atrapados mientras allá en el mundo, nuestros cuerpos deambulan como autómatas viviendo sin guía.
Hoy, sumergido con los demonios, tejo una cuerda mágica que me proteja de caer así, para atarla a mi cintura y regresar como siempre, sin ayuda... al mundo de los vivos.
Saikio Shore...
El Último Caballero Samurai...
 
(28-Agosto-2006)

viernes, 14 de julio de 2006

Un Nuevo Comienzo...



¿Es, tal vez, una maldición la que nos acompaña en esos días en los que todo parece salir mal?
¿Una maldición como la que sufrían los Guerreros de la Rama Roja del Ulster, incapaces de defenderse durante nueve meses de los ataques de sus enemigos?
¿Son, tal vez, reminiscencias de nuestros errores de vidas pasadas?

Si es así, me gustaría averiguar que fue lo que hice mal en esa época remota de mi existencia. Tal vez fui un inquisidor, asesino de mujeres en la hoguera, tal vez un señor feudal, brutal, despiadado, ejerciendo su derecho de pernada sobre las jóvenes a punto de casarse. Si fue así, perdón. Perdón a aquellas a las que destrocé la vida, aquellas a las que humillé, maltraté o simplemente asesiné. Si esas son mis faltas, pequeño es el castigo. Si no son esas, agradecido estoy a la Diosa por no haberme permitido cometerlas, pero yo le pregunte entonces... ¿qué es lo que he hecho mal?

Hoy no fue un buen día. No me preguntéis por qué. La explicación sería muy larga, muy complicada, muy personal. Simplemente no fue un buen día por esos pequeños detalles que a través de la red se perciben difuminados, difusos, pequeños reflejos de cosas mayores, incertezas, palabras a medias, oscuros rincones oscuros en medio de la claridad. Se acabó el tiempo, y cada día todo es más confuso, todo se está convirtiendo en un claroscuro, sin tonos medios, o bueno o malo, o conmigo o contra mi.

Y algo siempre acechando. Siempre a la espera. ¿El amor? ¿El odio? ¿La indiferencia? ¿La soledad? ¿Tal vez ella? Quién sabe...

Sólo se que cada mañana me levanto con su imagen en los ojos, con su sabor en los labios, con su voz en mi oído... tan lejana, tan cercana, tan dulce, tan indiferente, tan mía, tan de otro... ella y sólo ella... ¿o hay otra? Tal vez... ¿quién sabe? Yo... lo sé... pero quizás no quiero saberlo... quizás cierre los ojos y camine sin mirar... cualquier cosa con tal de no caer en las garras de la soledad, en el pozo de los solitarios... aunque haya aprendido a vivir solo, aunque haya descubierto la grandeza que puede encerrar la soledad, tú y tu interior, solos, acompañados, tal vez para siempre, tal vez para nunca.

Hoy no quiero pensar en otra cosa, no, sólo en ella... porque se que ella no piensa en mi... ese será mi castigo... y mi penitencia... querer, tal vez amar, siendo ignorado, quizás no ignorado, tal vez sólo sufriendo cierto grado de indiferencia... ¿será producto del miedo? ¿O es acaso que realmente no le importa? ¿O es un juego del que no conozco las reglas?

Un amor antiguo... de raíces fuertes... y otro nuevo, lleno de vigor... ¿es posible amar a dos personas al mismo tiempo? Yo creo que sí... pero tal vez me está engañando... ¿Debemos cortar el nuevo amor antes de que crezca y se haga fuerte? ¿O debemos cuidarlo, permitiendo que crezca por encima del otro, del antiguo? ¿O debemos intentar cuidarlos a los dos, permitiendo que sobrevivan, que se sobrevivan, que nos sobrevivan?

Es casi medianoche... el día se acaba, y con él muchas cosas... pero siempre hay un mañana, nadie puede olvidar eso. Creo que me estoy haciendo viejo... quizás no físicamente... pero mi alma tiene muchos años, muchas vidas, siglos y siglos de viaje a través del tiempo, mi alma se hace vieja, lo siento en mi interior... tal vez nuestras almas, llevan caminando juntas muchos siglos, tal vez están cansadas de sufrir, tal vez deseen descansar por fin... dejémoslas descansar pues... no más amor, no más odio, no más sangre ni guerra, no más sentimientos, no más sufrimientos... sólo días de monotonía, sólo una vida gris sin nada más... estoy cansado, tan cansado... creo que estoy vaciando mi alma, por fin, pero sólo a medias... mi parte consciente no permite que todo sea dicho, sigo engañándome a mi mismo... es una suerte que las palabras nunca digan toda la verdad, aunque así lo parezcan... es una suerte para los que son como yo, cobardes...

El día se acaba... buenas noches... dormid bien... yo soñaré con ella... como siempre... es tan triste no poder evitarlo... no quiero amar, no quiero sufrir, sólo quiero simplemente vivir...

Tranquilidad, lentamente pasan las noches con sus días,
mientras él piensa en lo que fue antes, en lo que será y en lo que es.
Fue amante, amado, odiado y el que odió, sí, fue él,
y será algún día de nuevo señor de campos de pasión
y quizás ella llegará a él entre nieblas de recuerdos, sí.
Pero no sabe lo que es ahora, nadie, todos, alguno,
ella no lo conoce aunque él le hablara en la tarde, en aquella tarde,
cuando los árboles olvidaban sus sombras sobre ellos,
y se escuchaban voces cantando sobre la hierba en un día cualquiera,
convertido en el día en que él se clavó espinas en el corazón.
Sí, no, él no sabe, no cree, no piensa, no vive, no ama,
no, si ama, y quiere, adora, besa, sueña, y por fin, muere,
de amor, bajo el olvido, sí, él la quiere, pero no quiere que lo sepa,
y por eso va a morir a la playa donde todo comenzara en un tiempo muy distante,
antes de ella, y de él, antes de nacer las estrellas de sus ojos.
Y así él sabrá lo que es, por lo menos un instante.

Saikio Shore...
...El Último Caballero Samurai...

(14-Julio-2006)

lunes, 10 de julio de 2006

¿Por qué escribo...?

¿POR QUÉ ESCRIBO...?


Escribo…
…porque soy como un gato…
…al que le gusta y trata de saltar fuera de su sombra…
…tratando de atrapar a la golondrina que hace el verano…
…y con ella beber el dulce agua del atardecer.

Escribo…
…simplemente porque no sé…
…no sé hablar en público…
…simplemente porque le temo…
…les temo… …a las mujeres.

Escribo…
…porque vuelco así todo lo que siento en un papel…
…fusionándome con las palabras…
…para construir maravillas…
…para transmitir mi motivación a escribir sentimientos.

Escribo…
…porque cuando los seres humanos no podemos entender...
…ahí esta el papel...
…porque abrazan pensamientos, reflexiones, emociones...
…por esa necesidad que todo ser tiene de trascender.

Escribo…
…para que, al menos, queden las palabras…
…y a modo de espejo o reflejo…
…podamos reconocernos en los ojos del otro….
…por impulso e instinto de supervivencia.

Escribo…
…porque la pluma le dice a mi mano derecha…
…que quiere dibujar los impulsos del corazón…
…sobre un pequeño pedazo de papel…
…porque mi imaginación vuela alto y se desborda.

Escribo...
…para desahogarme y en cierto modo…
…poner en palabras pensamientos…
…o sentimientos interiores míos…
…o que logro captar de los demás.

Escribo…
…para poder tranquilizar mi alma y mi ser…
…y que con cada palabra o párrafo que escriba…
…se alivie más de esos dolores… de esos amores no correspondidos…
…o simplemente de esas ideas locas o fantasiosas que se me ocurren.

Escribo…
…porque mi alma me empuja y golpea…
…y me precipita a mover mis manos…
…me precipita a moldear mis propias montañas de pensamientos…
…a reventar misterios……a inventar mis sueños.

Escribo…
…porque después de tanto nadar...
…siempre quiero morir en alguna orilla…
…porque amo el sentir y al escribir…
…desahogo todas mis angustias y dolores.

Escribo…
…porque cuando escribo toda la angustia y la pena se disipan…
…porque nace algo en mi interior que fluye por mis manos…
…que a veces ni yo entiendo…
…pues la razón muchas veces no puede explicar ni expresar sentimientos.

Escribo…
…porque es mi homenaje a la noche…
…y al viento que acaricia mi cara…
…a la brisa que conmueve mi cuerpo…
…y a la eterna paciencia de la luna y las estrellas que me escuchan.

Escribo…
…porque en ello encuentro el placer…
…de decir lo que tal vez…
…no toda la gente que me rodea…
…está preparada a escuchar.

Escribo…
…para desahogarme…
…para reflejar en el papel…
…lo que mi corazón dice…
…o lo que mi cerebro piensa.

Escribo…
…porque me gusta mirarme…
…entre las manchas de tinta en el papel…
…porque sino lo hago…
…mi alma muere.

Escribo…
…porque me falta razón y me sobran sentimientos…
…porque es la forma de conectarme directamente conmigo…
…porque es la solución quizás a mis temores…
…porque me gusta dar aquello que no tengo…

Escribo…
…para sentir mi propio dolor y mi emoción…
…para descubrir todas las cosas que no sé…
…para inventarme un mundo distinto…
…para encontrar la verdad a mi vida.

Escribo…
…porque en mi realidad oscura, es un escape…
…porque es la única forma en que quizás puedan entenderme…
…y si no es así por lo menos…
…yo... sé lo que digo.

Escribo…
…porque soy un poco ángel y demonio…
…porque me gusta la ironía y sólo es respetable en el papel….
…porque soy Dios cuando escribo…
…y me gusta ser Demonio si me critican.

Escribo…
...porque nunca he dejado de sentir…
…porque mi corazón no deja de latir…
…por todos los sueños que aun me faltan por cumplir…
…por la ilusión que genera en mi… un nuevo amor.

Escribo…
…porque me gusta ver la reacción de la gente (mi gente)…
…le escribo al sentimiento, al amor, a la amistad, a la verdad (mi verdad)…
…porque me cuesta hablar en público…
…porque no se decir "te amo".

Escribo…
…como parte de mí legado, de mi testamento…
…porque no se hacer otra cosa para liberar mis sensaciones, angustias y emociones…
…porque se que alguien leerá algún día lo que escribo y sentirá lo que yo he sentido…
…simplemente por el simple y mero hecho de escribir.

Escribo…
…con la certeza de que leerás alguna vez…
…lo que he escrito pensando en ti…
…y cuanto fue mi amor hacia ti...
…para no morir, o tal vez para morir lentamente.

Escribo…
…para poder respirar aire nuevo...
…para que mi corazón renazca...
…para poder vivir...
…para olvidar.

Escribo…
…para dejar testimonio de lo vivido…
…para expresar mis pensamientos…
…para conocerme, confesarme, consolarme, entenderme, reírme, llorarme, amarme, negarme…
…y a veces hasta para despejarme de mis fantasmas interiores.

Escribo…
…para llegar a mí, después de tantas lunas de buscarme…
…para llegar a ella, aun sabiendo que es posible que no la encuentre…
…para ser libre dentro de mis propios mundos…
…para poder unirme a la fantasía y huir de la realidad.

Escribo…
…para desahogarme…
…para poder decir todo lo que pienso…
…sin que alguna vocecilla humana me diga: estás loco…
…para reírme de las idioteces que pensé hace un par de días o de meses o de años…

Escribo…
…porque me gusta hacer de todo…
…porque hay cosas que amo hacer…
…como el amor a una mujer…
…y escribir sobre un papel.

Escribo…
…porque no encuentro palabras para decir lo que pasa o sucede en mi alma…
…lo que sufre y siente mi corazón…
…o simplemente para liberarme de esta realidad en la que cada día vivo y muero…

Por eso escribo…
…para eso existo…
…para escribir algo que sale de mi alma…
…y de mi corazón en cada momento…
…cuando llega la inspiración.

Escribo…
…porque la escritura es el dialogo de mi interior con el exterior…
…cuando otros simplemente lloran.


Sabéis…
Tras un período de recogimiento y meditación…
A veces lo mejor es apartarse del mundo, oír el viento soplar entre el maíz, sentir la soledad en todo su esplendor… a veces es bueno sentirse solo, porque así puedes apreciar realmente lo que es sentirse querido.
Sí, realmente no es tan malo estar solo… aunque pueda parecer lo contrario… ahora aprecio más la soledad, la busco, la encuentro… la soledad y yo… y también ella que llegará…

Perdonad esta noche mis recorridos públicos a través de los laberintos privados de mi cabeza… pero… ser Caballero no es fácil… tal vez un día lleguéis a comprenderlo y a apreciarlo… como yo lo hago.
Saikio Shore...
...El último Caballero Samurai...


(10-Julio-2006)

sábado, 8 de julio de 2006

Relato de una Noche sin Luna...

Relato de una Noche sin Luna...


Hace días ya… desde que se perdió la luna, y el manto negro de la noche ha cubierto todo…
…ha devorado toda luz, toda casa… toda calle… toda vida…
Todo…
…perdido en esta lluvia de tinieblas.
Todo así… desde la primera noche en que la luna se fue, dando paso a la avalancha de sombras… lleno todo de una densa oscuridad, y las luces del auto tratando inútilmente de penetrar en ella, sucumbían ante la noche… la visibilidad era casi nula y el camino desierto parecía haberse estado repitiendo desde hacía media hora.

La fiesta había acabado horas atrás.

Perdí la noción de donde estaba… de adonde iba, pero nunca dudé en poder llegar… íbamos varios.
Todos camino a sus casas… cabizbajos… o quizás no tanto… depende…

El sonido de la radio de un coche, el vaivén del mismo, el humo de la calle, los primeros rayos de luz y las voces desordenadas… se transformaron de pronto en una sinfonía.

La sinfonía del caos…
…repitiéndose una y otra vez, como musicalizando el camino, dando vueltas una y otra vez…
…sintiéndome ajeno, miraba el carrusel de imágenes y sonidos, vueltas y vueltas… yo estaba ausente… yo ya no estaba ahí, tal vez, me había ido a buscar la luna.

Hasta que la luz de un coche, me despertó y rompió la sinfonía.

Miré la hora, era tarde ya, más tarde que de costumbre para ser domingo, y pensé en un momento en que tenía que madrugar para trabajar…
…después pensé en ti y eso me consoló, el hecho de tenerte cerca, de mirar y verte… oyendo las voces, buscando la luna… nos fuimos perdiendo en la noche, resignados ya a ser devorados por la "tenebrau" pasando el tiempo, las horas, los minutos… y cada rostro, cada voz que integró la monótona melodía se fue perdiendo y se apagaba con el continuo abrir y cerrar de las puertas del coche. Uno a uno, poco a poco, cansados de esperar algo de la noche, se rindieron. Quedando sólo tú…

…Tu mirada cansada denotaba sueño.
…Yo los ojos al cielo buscando a la luna, muriendo de rabia, por mi cobardía de tenerte cerca y no poder decirte cuanto te amaba…
…cuantas noches pasé en vela, pensando en verte, llamando tu nombre, gritándolo al viento… nadie ha muerto aún de cobardía, yo sentí ser el primero.
Me miraste consternada, y con una sutil picardía me preguntaste:

-¿Puedo subir?

Traté de explicarte… traté de decirte… pero el miedo me detuvo… no quería ver borrada la sonrisa de tu rostro… no quería que te fueras siendo tú la única luz que me quedaba después de haberse ido la luna…

Saikio Shore…
…El último Caballero Samurai…

(08-Julio-2006)

viernes, 28 de abril de 2006

Sabrás lo que es ser Padre...


Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando sientas muy hondo el latido de ese pedazo de tu corazón sobre tu pecho, lleno de gran orgullo.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando comprendas que el fruto de tu sueño es ahora una realidad palpitante, ternura en piel viva y mirada inocente ante tu regocijo.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando entiendas que tu sueño ya jamás será completo, cuando sepas del llanto de la madrugada, de tus largas ojeras y la satisfacción de ver a tu pequeño tranquilamente dormido, aunque tú no lo puedas hacer.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando radiante pasees a tu hijo en su pequeño cochecito, le hables aunque sepas que no te entiende aún y lo veas descubriendo asombrado cada pequeña cosa que constituirá su primera lección de filosofía.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando en la noche corras por esa medicina que necesita para aliviar su fiebre, al llevar la cuenta de sus vacunas y cuando de puntillas te acerques a su cuna a escuchar su respiración, acompasada y feliz.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando por primera vez te diga papá, ría cuando lo lances al aire y no sienta el peligro porque tú le das seguridad con tu sonrisa.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando le impulses a dar sus primeros pasos, inequívoca señal de que empieza el camino hacia su destino y corras detrás de su bicicleta donde afanosamente pedalea los primeros caminos y distancias del peregrinar futuro de su vida.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando lo lleves por vez primera a la escuela y veas sus ojos llorosos porque no quiere separarse de ti y sientas el alma dolorida al alejarte dejándolo en medio de otros egoísmos que, sin embargo, le enseñarán a compartir.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando te muestre sus primeros garabateados dibujos, pequeño Picasso que anuncia en ellos el afán por la belleza que se esconde en su corazón.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando se abrace a ti, tomando tu mano simbolizando con ello la confianza de tu fortaleza, que le dará seguridad en su andar.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando reclame tu tiempo y tu tengas que buscarlo y encontrarlo en donde puedas, cuando lo lleves al circo y a la playa y al paseo cansado pero gratificante, cuando juntos soñéis en las vacaciones en que ambos se pertenecerán por completo, cuando le enseñes a jugar y a llenar rompecabezas y juntos caminéis por el parque cualquier tarde esplendorosa de abril.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando te rete con sus primeras preguntas y de momento no sepas cómo contestarlas, cuando le ayudes a escribir la carta a Papá Noel y esperes la vigilia de la Navidad con el ansia compartida de una nueva niñez tuya y descubra en tu abrazo, en tu caricia y en tu beso incondicional, cuánto le amas.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando ves que va creciendo y tú lo acompañas, va avanzando y tú estás a su lado, y se va haciendo adolescente y en ese proceso tú no lo dejas, por duro que sea el ver que poco a poco se desprende de ti, para ir en busca de sí mismo.

Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando oigas el reclamo inesperado y su deseo de independencia. El día que deje de acompañarte, porque sus amigos lo esperan y sientas que tu corazón se estremece, porque el día llegó antes de lo que pensabas y sientas profundamente que así debe ser, porque es el precio que pagarás por el aprendizaje de su vuelo definitivo.

Y finalmente...
Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando un día tu hijo tenga que partir para estudiar a otro lugar, o a un trabajo distante y la nostalgia consuma las horas que antes feliz disfrutaste en su compañía y quizás sea el teléfono o internet la lejana liga que te una a él.

Y sobre todo...
Sabrás lo que es ser Padre...
...cuando alguien venga y se lo lleve de tu lado para perseguir otro arco iris, el de su propia vida, compartida con alguien a quien amará y tú deberás aceptarlo, porque esa es la ley de la vida y tu hijo te fue solamente prestado por un tiempo.

Entonces... sabrás lo que es ser Padre.

Que no estudiaste para ello, pero lo viviste y lo seguirás viviendo. Y el regocijo que eso te proporcionará deberá entonces ser mayor que el dolor que supone el sentir que algo muy tierno se despide de tu alma. Pero es sólo entonces cuando podrás saber completamente la maravillosa experiencia, que produce ser Padre.

Recordad que... "El Amor no es un sentimiento... es una actitud..."

Nota: Adaptación libre del texto de Rubén Núñez de Cáceres V.


DEDICADO A CHRISTIAN GARCÍA EXPÓSITO...
(Mi Hijo...)

Saikio Shore...
...El Último Caballero Samurai... 

(28-Abril-2006)