"MI REFUGIO... EL REFUGIO DEL GUERRERO..."

"MI REFUGIO... EL REFUGIO DEL GUERRERO..."

Tengo un poco de Amergim, hijo de MIL... a veces Guerrero, otras Bardo, Druida, Juez ó Poeta...Supongo que los que me conocen entenderán lo que los ingleses llaman "Bard mood", humor de Bardo... tan pronto alegre como triste, tan pronto de broma como serio.

Tan cambiante como el clima de Irlanda... tan imprevisible...

De nuevo abro las puertas de mi corazón al mundo... porque las puertas de mi alma... ya están rotas...


RESURGIENDO... (OTRA VEZ...)

RESURGIENDO... (OTRA VEZ...)


Después de casi un año que dejé olvidado este bloc, regreso a la carga...

...poco a poco iré añadiendo mis "Pensamientos en Voz Alta...", mis "Paranoias...", aquellas letras que desde hace más de una década fueron llenando las páginas de un libro que nunca vio la luz...

Hoy de nuevo, la luz del recuerdo me invade, y a pesar de lo que piensen u opinen de mi aquellos que me conocen, no voy a guardar por más tiempo mis pensamientos...

Junto a mis "Pensamientos..." (a mi me gusta llamarlos "Paranoias..."), añadiré de vez en cuando relatos de otros autores (firmados, por supuesto) que me han llamado la atención en alguna ocasión.

Espero sepan leer mis "paranoias", pues a veces son pensamientos que sólo expresan sentimientos sin sentido, otras sólo son fantasías sin ningún enlace con la realidad, pero en todas ellas expreso algo entre líneas...


...es una suerte para aquellos que son como yo... (cobardes...), lo que se puede llegar a decir a través de las letras.


Hasta muy pronto...

Dewa Matta...

viernes, 1 de junio de 2018

El Viaje es muy corto...


"...
Una joven mujer se subió en un autobús y tomó su asiento, en la siguiente parada, una anciana fuerte y gruñona subió y se sentó junto a ella, se apretó en el asiento y la golpeó con sus numerosas bolsas...

Al ver que la joven se mantenía en silencio sin protestar se molestó, y le preguntó por qué no se quejó al golpearla con sus bolsas...

La joven respondió con una sonrisa:
-No es necesario ser grosero o discutir sobre algo tan insignificante, el viaje juntos es tan corto. Bajaré en la próxima parada.

Esta respuesta merece ser escrita en letras de oro:
-"No es necesario discutir sobre algo tan insignificante, nuestro viaje juntos es tan corto"-

Si cada uno de nosotros comprendiera que nuestro tiempo aquí es tan corto... Que oscurecerlo con peleas, argumentos inútiles, celos, no perdonar a los demás, el descontento y una actitud de averiguación constante es una ridícula pérdida de tiempo y energía...

¿Alguien rompió tu corazón?
Tranquilízate, el viaje es muy corto.

¿Alguien te traicionó, intimidó, engañó o humilló?
Tranquilízate, perdona, el viaje es muy corto.

¿Alguien te insultó sin razón? 
Tranquilízate, ignora, el viaje es muy corto.

Cualesquiera que sean los problemas que alguien nos traiga, recordemos que nuestro viaje juntos es corto.

Nadie sabe la duración de este viaje. Nadie sabe cuándo llegará su parada. Nuestro viaje juntos es muy corto.

Vamos a apreciar a amigos y familiares. Seamos respetuosos, amables y perdonémonos el uno al otro. Vivamos llenos de gratitud y alegría.

Después de todo, nuestro viaje juntos es muy corto!

Deseo que tengas un viaje agradable y que tus sueños se cumplan, tus éxitos se multipliquen y que disfrutes plenamente con quien te toca y quieras viajar...
...y si por alguna razón nos vemos en alguna estación, me dará mucho gusto saludarte y darte un abrazo...

Sonríe, el viaje es muy corto...
..."

(ANÓNIMO)

jueves, 31 de mayo de 2018

Apresado en Libertad...


24 horas en un zulo... 24 horas de cuerpo apresado...
...pero libres para mi imaginación...
Hoy toca disfrutar de la libertad del pensamiento...

Nos miramos sonriendo uno frente al otro...
...mientras nuestras almas desean...
...besarse y fundir nuestros cuerpos desnudos en uno...

Saikio Shore...
El último Caballero Samurai...
(31-Mayo-2018)

viernes, 11 de mayo de 2018

*** EN PROCESO ***

CAPÍTULO 1 - 2ª PARTE



-Se nos fue de las manos, hay que buscar una solución. –musitaba el bueno de Bellcross.
-¿Solución? ¡No! Debemos continuar, sólo hay que modificar algunos parámetros y la obra será maestra. –refunfuñaba Mordak.
-Pero…
-No hay pero, sabes que no hay lugar para un pero, no es el momento, ya no hay tiempo.
-Pero, mi Señor…
Mordak lo interrumpió con la mirada…
Miedo, todos le temían, a pesar de su avanzada edad Mordak se conservaba como si un pacto, con entes oscuros, hubiera realizado en su juventud, apenas aparentaba llegar a la treintena cuando realmente pasaba con creces el medio siglo.
Se contaban de Mordak tantas historias y leyendas que sólo pronunciar su nombre helaba el cuerpo de los más valientes.
Allí en aquella lúgubre estancia de pie junto a la chimenea miraba fijamente Mordak a Bellcross, su alta figura negra se desdobló… alzó su mano y los cuervos graznaron…
Bellcross palideció…
-Mi Señor, yo no quería…
Silencio…

***-***

Era prácticamente imposible contenerlos a todos…
O un milagro llegaba hasta ellos o no podrían contenerlos durante mucho más tiempo…
Eran cientos… quizás miles… tal vez millares los que se divisaban en el horizonte acercándose hasta ellos…
-Esto es una locura, vamos a morir…
-Hoy no –dijo el salvaje Fogox a la vez que sonreía… - Hoy no.
Cyan lo miraba con una extraña mezcla de miedo, amor y asombro, la joven y dulce salvaje no era capaz de comprender como se había llegado a aquella situación, admiraba demasiado a Fogox y a la vez estaba tan locamente enamorada de él que su ceguera le impedía en parte ser consciente del peligro real que se avecinaba.
-Están ya muy cerca –indicó la muchacha.
-Aguanta un poco más –le susurró Fogox dulcemente al oído mientras le hacía un guiño para tranquilizarla –ya casi he terminado.
La joven salvaje mantenía sus brazos alzados al cielo, concentrando el haz de luz que emanaba de ellos cubriendo el lugar con una azulada esfera de unos pocos metros. Pocos ya quedaban en su interior, apenas siete salvajes dentro y pocas decenas tratando todavía de impedir el avance del mal.
Y el mal continuaba devorando todo a su paso… hasta atravesar la esfera y cubrirlo todo por completo…

***-***

Él era el creador de mundos, no encajaba en su sociedad, siempre era “el raro”, pero ya se había acostumbrado a escuchar aquello a lo largo de su poco más de un siglo de vida… ciertamente… no era normal.
-¡Cuidado! –exclamó el anciano.
De nuevo su mente se nubló y tuvo una visión, campos desolados, una gran batalla en la cual sus protagonistas principales salían ilesos y se escabullían por uno de los numerosos túneles que daban a la zona desconocida.
No era la mejor opción, pensó, aunque probablemente en aquella situación era la única.
-Maestro, lo ha visto, ¿verdad? –preguntó Droid su joven acólito.
-Así es, los he visto –murmuró.
Droid, el joven aprendiz se quedó unos instantes mirando fijamente al anciano esperaba algo más en su respuesta.
-¿Todavía estás ahí?
-Lo siento, ya me marcho maestro, solo pensaba que tal vez…
-“Solo pensaba que tal vez”. Error, debes aprender a no pensar, todo lo que pienses puede influir en el trascurso natural de los acontecimientos, absolutamente todo lo que pienses se puede crear, no debemos abrir puertas en el mundo que desconocemos, déjate guiar, que las visiones de los acontecimientos lleguen a ti pero no al revés, no generemos acontecimientos a través de nuestros propios pensamientos. Debes aprender a controlarlo, trabájalo joven Droid. –le interrumpió el anciano.

***-***

El mellado albino reía a carcajadas de nuevo.
-¿Te parece gracioso? –le espetó Grunk el gran gigante de forma tosca.
-Lo es, me parece increíble que algo tan feo como tú se vaya a casar. –contestó Daryl el albino.
Grunk lo miró como si lo fuese a fulminar pero aun siendo tan grande y el albino tan insignificante y delgado, sabía que no era buena idea.
-¿Se lo has dicho ya, le has dado ya el anillo? –sonrió el albino.
-Eso es de mentes débiles, nosotros, los verdaderos machos alfa no damos anillos ni esas tonterías, nosotros conquistamos imperios en dos días y les regalamos la nación conquistada a nuestra princesa guerrera. –gritó el gigante a la vez que sonreía.
Ingenuo, que vas a conquistar tú con lo bobo que eres, pensó el albino mientras continuaba afilando su puntiaguda daga.
Saikio Shore...
El último Caballero Samurai...

CONTINUARÁ...